“Siempre me ha inspirado la poesía, no admite una relación intelectual. Funciona con la intuición y yo trabajo con pensamientos no lineales. Sin embargo, y a diferencia de una pintura abstracta que ves y te permite pensar lo que quieras, el bailarín es un ser humano y por eso el público no lo relaciona con ideas abstractas. Me interesan ideas que hagan que el público se abra a su propia imaginación y que le hagan sentirse partícipe de mis creaciones. Todo los movimientos que hago se crean a la par que los conceptos. Es posible que el movimiento en sí me inspire, pero no es lo habitual. Trabajo con el concepto y con una idea y los movimientos llegan después. El oficio te aporta mecanismos para canalizar la intuición.
Con la gente que tengo a mi lado trabajo con la improvisación. Se ponen un vestido morado y lo encuentro maravilloso. Trabajo con bailarines que generan muchas ideas. Yo les aporto la poesía y ellos me dan movimiento.
La inocencia es la base del arte. Si eres capaz de arriesgarte a la hora de crear, tienes que hacerlo con inocencia."
Carolyn Carlson (me encanta esta mujer)
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